En estas fiestas patrias en las que existe una polémica sobre si realmente vale la pena festejar, si la historia sobre nuestros héroes que nos han contado en la escuela está incompleta, ¿de qué vamos a festejar si nuestro país está mal o “peor que nunca” respecto al narcotráfico, la inseguridad y demás?, en fin, después de mil y un millón de cuestionamientos que cada año surgen en estas fechas, me vino a la cabeza, que una de las tantas cosas que más amo de éste país, es su gastronomía. Tantas cosas que tiene nuestro país, un país tan rico y vasto como las recetas que a diario se preparan en todos sus hogares y regiones. Pero hay un platillo en especial, que por más sencillo que sea, seguro es uno de nuestros consentidos, que en todas nuestras casas se ha preparado y del cual nos acordamos siempre después de una noche de “unas cuantas copas”…¡los chilaquiles!
Este magnífico platillo es un desayuno tradicional hecho a base de tortilla de maíz cortada en triángulos y frita y acompañada de salsa (verde o roja), crema, queso, cebolla en rodajas, epazote y en ocasiones se acompaña de pollo, carne, huevo frito o chuleta y lo que no puede faltar, unos buenos frijoles refritos, ya sean bayos o negros.
Quelite |
En Oaxaca la salsa se prepara con jitomate, ajo, cebolla, y chile pasilla del estado y un poco de epazote, con queso fresco, perejil y cebolla ¡imaginen esa delicia!. Allá, a veces en lugar de esta salsa, los acompañan con un mole amarillo y en lugar de tortilla usan las famosas “tlayudas”.
En el centro de nuestro país acostumbran a comerlos con salsa verde cocida, ajo, epazote y en ocasiones cilantro. A la gente en Guanajuato les gusta prepararlos más con salsa roja muy picosa hecha de chile guajillo, tomate, cebolla y ajo, con queso chihuahua o algún otro bien gratinado. Igual en Jalisco, pero las familias con más tradición en la población de Tequila, usan queso añejo para acompañarlos y a veces con una deliciosa carne asada.
Preparación de Tortilla, Oaxaca, México |
Chilaquiles rojos |
Ahora sí, felicidades a todos los mexicanos y a nuestros ancestros creadores de tan especiales platillos con los que disfrutamos del ser mexicanos a diario.